Dos partidos a disputar, el pitido inicial sonará antes para una afición azul que partirá en procesión desde Plaza América y que abarrotará el Tartiere como si de un partido de Primera se tratase. Ambiente reivindicativo, festivo por la buena marcha de la ampliación de capital y por el grito de que el oviedismo está más vivo que nunca, no sólo en Asturias sino en todo el mundo. El azul ya es un sentimiento global. Aislar a los futbolistas del ambiente será el primer hándicap para Sarriugarte.
Dificultad en ambientes extraordinarios: desde la primera derrota como locales en Tercera ante Lealtad (0-2) el día en que se apoyaba a Manuel Lafuente, al batacazo ante el Pontevedra en la primera lucha por volver a la LFP, pasando también por las victorias agridulces ante Arteixo y Caravaca. Ambiente inigualable e impensable en toda la Segunda B, ansiedad por demostrar y satisfacer a una grada entregada y que muchas veces juega en contra del futbolista. Sobrexcitación por agradar, tan peligrosa o más que la falta de activación en un duelo cualquiera. Bajar las pulsaciones de los que salgan, el tópico de "jugar con corazón y cabeza" más necesario que nunca.
Será la primera misión de Sarriugarte, no la única. Recomponer el ataque, bajas de Manu Busto y Josep Señé en la mediapunta, también la de Óscar Martínez para dejar el banquillo sin alternativas a la figura del '9'. Panorama abierto para Dani Aquino jugando por detrás de Diego Cervero. Futbolista al servicio del equipo pero también equipo al servicio del futbolista, crear el contexto adecuado para que el jugador dé lo mejor de sí mismo también irá en beneficio del colectivo. Segundo punta, jugando con libertad por detrás de una referencia fue como el murciano se dió a conocer con 16 años, los grandes llamaban a su puerta. Implicación oviedista, ha de ser su tarde para ganar un activo más en la lucha por el ascenso.
Xavi Moré y Javi Casares en las bandas, desequilibrio en los costados para insistir desde el primer momento. Pascual es la duda en centro del campo, único mediocampista capaz de jugar en corto y en largo. Las diagonales juegan a su favor, él mejor que nadie puede propiciar esas situaciones de 1vs1 para ser profundos por fuera. Difícil elección, Cerrajería y Aitor Sanz parecían inamovibles hasta hace poco. Será la declaración de intenciones de Sarriugarte, sin descartar que jueguen todos juntos para guardar alguna bala en la recámara tras el descanso.
Intensidad desde el inicio, que los chicos del Real Madrid 'C' no se suelten porque el Tartiere también será el escenario propicio para que muestren ese fútbol con el que sueñan llegar al Bernabéu. Mentalización pre-partido para que los nuestros sepan lo que se van a encontrar desde el primer minuto, no regalar el primer cuarto de hora porque será entonces cuando pueda llegar el disgusto; Aulestia lo evitó ante Sergio Tejera en la eliminatoria ante el Mallorca 'B'. Diego Cervero, Xavi Moré y Aitor Sanz, columna vertebral acostumbrada al ambiente para sostener al equipo en el comienzo. La experiencia de Mantovani y David Fernández también sumará en esos primeros minutos de locura.
El partido más importante se juega durante toda la semana, fuera y dentro del Tartiere. La supervivencia está en juego y el oviedismo siempre responde, ahora ya llega a todo el mundo. Pero priorizar una victoria no resta importancia a la otra, los tres puntos del Domingo son vitales para mantener cerca el objetivo del playoff, también para enganchar a los rezagados y continuar con la ola de acciones a partir del Lunes. Que esos nuevos oviedistas repartidos por todo el planeta se sientan orgullosos de su primera victoria azul.
Foto: Jonás Sánchez
Dificultad en ambientes extraordinarios: desde la primera derrota como locales en Tercera ante Lealtad (0-2) el día en que se apoyaba a Manuel Lafuente, al batacazo ante el Pontevedra en la primera lucha por volver a la LFP, pasando también por las victorias agridulces ante Arteixo y Caravaca. Ambiente inigualable e impensable en toda la Segunda B, ansiedad por demostrar y satisfacer a una grada entregada y que muchas veces juega en contra del futbolista. Sobrexcitación por agradar, tan peligrosa o más que la falta de activación en un duelo cualquiera. Bajar las pulsaciones de los que salgan, el tópico de "jugar con corazón y cabeza" más necesario que nunca.
Será la primera misión de Sarriugarte, no la única. Recomponer el ataque, bajas de Manu Busto y Josep Señé en la mediapunta, también la de Óscar Martínez para dejar el banquillo sin alternativas a la figura del '9'. Panorama abierto para Dani Aquino jugando por detrás de Diego Cervero. Futbolista al servicio del equipo pero también equipo al servicio del futbolista, crear el contexto adecuado para que el jugador dé lo mejor de sí mismo también irá en beneficio del colectivo. Segundo punta, jugando con libertad por detrás de una referencia fue como el murciano se dió a conocer con 16 años, los grandes llamaban a su puerta. Implicación oviedista, ha de ser su tarde para ganar un activo más en la lucha por el ascenso.
Xavi Moré y Javi Casares en las bandas, desequilibrio en los costados para insistir desde el primer momento. Pascual es la duda en centro del campo, único mediocampista capaz de jugar en corto y en largo. Las diagonales juegan a su favor, él mejor que nadie puede propiciar esas situaciones de 1vs1 para ser profundos por fuera. Difícil elección, Cerrajería y Aitor Sanz parecían inamovibles hasta hace poco. Será la declaración de intenciones de Sarriugarte, sin descartar que jueguen todos juntos para guardar alguna bala en la recámara tras el descanso.
Intensidad desde el inicio, que los chicos del Real Madrid 'C' no se suelten porque el Tartiere también será el escenario propicio para que muestren ese fútbol con el que sueñan llegar al Bernabéu. Mentalización pre-partido para que los nuestros sepan lo que se van a encontrar desde el primer minuto, no regalar el primer cuarto de hora porque será entonces cuando pueda llegar el disgusto; Aulestia lo evitó ante Sergio Tejera en la eliminatoria ante el Mallorca 'B'. Diego Cervero, Xavi Moré y Aitor Sanz, columna vertebral acostumbrada al ambiente para sostener al equipo en el comienzo. La experiencia de Mantovani y David Fernández también sumará en esos primeros minutos de locura.
El partido más importante se juega durante toda la semana, fuera y dentro del Tartiere. La supervivencia está en juego y el oviedismo siempre responde, ahora ya llega a todo el mundo. Pero priorizar una victoria no resta importancia a la otra, los tres puntos del Domingo son vitales para mantener cerca el objetivo del playoff, también para enganchar a los rezagados y continuar con la ola de acciones a partir del Lunes. Que esos nuevos oviedistas repartidos por todo el planeta se sientan orgullosos de su primera victoria azul.
Foto: Jonás Sánchez